Lección de economía

Lección de economía

Por el 29/04/2019 en Blog

Es época de liquidar impuestos, momento de hacer balance de ingresos, gastos. Tiempo de valorar las pérdidas y las ganancias. Para tranquilizar al lector diré, que no voy a utilizar este espacio para hablaros de la salud de mis finanzas, mi reflexión está centrada en la economía del corazón y  de cómo nuestra cuenta de resultados puede reflejar un saldo positivo: el de la salud.

Hay una herramienta que nos puede ayudar a ahorrar ira, disminuir el coste del odio, limitar el consumo de rabia, al mismo tiempo que aumenta la tranquilidad, amplía la calma y expande la paz interior. Estoy hablando de “El Perdón”.

Quizá estamos connotados por el concepto de cristiano de perdón, que implica pecado y culpa. La Biblia nos cuenta en el antiguo y nuevo testamento, como al inicio el perdón podía ser solo otorgado por Dios, después Cristo realiza esta labor y la extiende a sus discípulos para más tarde ampliar la invitación a toda la comunidad cristiana.

Más allá de la religión, el acto de perdonar ha sido estudiado a nivel científico, Frederik Luskin de la universidad de Stanford, junto con otros expertos en psicología han desarrollado el Stanford Forgiveness Project, un programa de investigación y enseñanza enfocado en el perdón interpersonal, desarrollado con personas que han vivido situaciones de violencia en Irlanda del Norte, Sierra Leona o en los ataques del 11S en Nueva York. El programa se centra, en el estudio de los beneficios a las personas que han sufrido ese tipo de situaciones y no en los agresores.

Este y otros estudios demuestran científicamente los beneficios directos del acto de perdonar ( a mí misma y a los demás):

  1. Reduce el nivel de estrés: según estudios del Hope Center, reduce el nivel de cortisol.
  2. Ayuda a la salud del corazón: las personas que perdonan tienen el ritmo cardíaco más bajo y reducen su presión arterial, según otro estudio publicado en 2008.
  3. Reduce el nivel de dolor, las personas con dolores crónicos tienen menos tendencia a perdonar, cita un estudio de la universidad de Duke.
  4. Aumenta la esperanza de vida, según algunos estudios el aferrarse al rencor disminuye la longevidad.

Os invito a revisar vuestra “cartera de valores” y evaluar los fondos de inversión en perdón. ¡Suerte con los resultados!

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